El género de videojuegos de plataformas: saltos, nostalgia y evolución

El género de videojuegos de plataformas es uno de los más emblemáticos de la historia de los videojuegos. Desde los primeros días de las consolas caseras hasta las joyas modernas del gaming independiente, los juegos de plataformas han desafiado a los jugadores a través de niveles llenos de obstáculos, enemigos y, por supuesto, muchos saltos.

Origen del género: donde todo comenzó

Los videojuegos de plataformas nacieron en los años 80, y uno de los pioneros más recordados es Donkey Kong (1981), donde controlábamos a Jumpman (más tarde conocido como Mario) en su intento por rescatar a Pauline. El éxito fue tal que Nintendo consolidó el género con Super Mario Bros. (1985), un título que definió el diseño de niveles, mecánicas de salto y enemigos que se convirtieron en estándar.

El género se caracterizaba por desplazar al personaje lateralmente, evitar caídas y enfrentarse a enemigos con movimientos sencillos pero precisos. Era simple, sí, pero profundamente adictivo.

Características principales

Los juegos de plataformas tienen elementos clave que los hacen reconocibles:

  • Niveles diseñados para el desplazamiento horizontal o vertical
  • Mecánicas de salto como núcleo del gameplay
  • Obstáculos, enemigos y power-ups distribuidos a lo largo del escenario
  • Control preciso del personaje
  • Progresión por mundos o fases

Estos elementos han evolucionado, pero siguen siendo esenciales en títulos modernos.

Evolución en las distintas generaciones

Durante los años 90, el género vivió un boom en las consolas de 16 bits. Juegos como Sonic the Hedgehog, Mega Man X y Donkey Kong Country demostraron cómo los avances gráficos y sonoros podían hacer más vibrante la experiencia de juego.

Con la llegada de los gráficos en 3D, el género se adaptó con títulos como Super Mario 64 y Crash Bandicoot, que redefinieron cómo se podía saltar y moverse en entornos tridimensionales. Aunque fue un reto para algunos desarrolladores, los más exitosos crearon experiencias innovadoras que influenciaron a toda la industria.

El resurgimiento gracias a los estudios independientes

Si bien el género plataformas perdió protagonismo a inicios de los 2000 ante juegos más realistas y cinemáticos, el auge de los desarrolladores independientes lo revivió. Títulos como Celeste, Hollow Knight o Ori and the Blind Forest trajeron de vuelta la emoción de los saltos, combinando precisión, narrativa profunda y un estilo artístico único.

Estos juegos, además de ser visualmente impactantes, introdujeron mecánicas nuevas como los dash aéreos, paredes que se pueden escalar, o incluso el control del tiempo. Así, el género ha sabido reinventarse sin perder su esencia.

¿Por qué sigue siendo tan popular?

Hay algo especial en los juegos de plataformas. Ofrecen una mezcla ideal entre habilidad, exploración y satisfacción inmediata. La curva de dificultad suele ser justa, y cada nuevo nivel presenta un reto que invita a mejorar. Además, muchos jugadores encuentran en ellos un lazo emocional, un recuerdo de sus primeras partidas cuando eran niños.

Ejemplos imperdibles del género

Si estás buscando probar o revivir lo mejor de este género, aquí van algunas recomendaciones:

  • Super Mario Bros. 3 – Un clásico que consolidó muchas mecánicas básicas.
  • Rayman Legends – Una joya artística con niveles creativos y música integrada.
  • Celeste – Un desafío moderno que también trata temas de salud mental.
  • Hollow Knight – Aunque también considerado “metroidvania”, su plataforma precisa es fundamental.
  • LittleBigPlanet – Mezcla plataformas con creatividad y personalización.

El género de plataformas no es solo una reliquia del pasado; es una forma de arte en constante evolución. Ha sabido adaptarse a cada generación, mezclando nostalgia con innovación. Desde los juegos pixelados en 2D hasta mundos tridimensionales asombrosos, el espíritu del salto preciso y la aventura sigue vivo. Y lo mejor es que cualquiera puede sumarse: no importa si es tu primer juego o el número cien, un buen juego de plataformas siempre será una experiencia gratificante.

Deja un comentario